Los síntomas de embarazo son determinadas señales que advierten a la mujer de que su cuerpo está cambiando para que el bebé pueda alojarse y desarrollarse adecuadamente en su vientre durante las 40 semanas de gestación.
Durante los primeros días y semanas tras haberse percatado del retraso de la menstruación, la mujer puede percibir algunos síntomas de embarazo. Estas señales pueden ser más o menos evidentes lo que, por supuesto, depende de cada persona y de cada embarazo, pues puede ocurrir que no se perciba absolutamente nada o bien que se sucedan todos los síntomas que, además, suelen ser más acusados durante el primer trimestre.
¿Cuáles son los síntomas de embarazo más comunes?
Por supuesto, la ausencia de menstruación es el principal y más evidente síntoma de embarazo; sin embargo, es fundamental saber detectar otros síntomas y posibles molestias, pues es muy fácil que al principio se confundan con los síntomas premenstruales. A continuación, te detallamos cuáles son:
- Sangrado de implantación. En los primeros 2-3 días tras la transferencia embrionaria, se pueden producir pequeños y ligeros manchados. Se trata del sangrado de implantación, que puede tener lugar cuando el embrión llega al endometrio para la implantación en el útero y, como consecuencia, rompe algunos vasos sanguíneos que son los que le permitirán alimentarse y desarrollarse en el vientre materno. Puede ser consecuencia del proceso de la transferencia embrionaria, cuando se trata de un embarazo por reproducción asistida o ser puramente hormonal y no debe preocuparnos.
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- Sensibilidad mamaria. El pecho es una de las partes del cuerpo femenino que más sufre los cambios hormonales, y en el embarazo no iba a ser menos. Desde el comienzo de la gestación puede percibirse hinchazón, dolor leve e incomodidad en los pechos como consecuencia de la acción de la progesterona, que hace que estos aumenten de tamaño y se preparen para poder alimentar al bebé nada más nacer.
- Náuseas, vómitos y malestar general. Es común que la embarazada sienta malestar general, sobre todo durante el primer trimestre. Las náuseas y vómitos son más comunes por la mañana, aunque se pueden producir a lo largo de todo el día y suelen reducirse a partir de las 12 semanas de embarazo.
- Mayor sensibilidad olfativa y gustativa. Las embarazadas pueden desarrollar aversión o aborrecimiento a determinados olores y sabores, sobre todo cuando estos son fuertes (pescado, perfumes intensos e, incluso, a sus alimentos favoritos).
- En el embarazo gran parte de la energía se invierte en la creación, la alimentación y el desarrollo de una nueva vida, por lo que es completamente normal que se perciba mayor sensación de cansancio a la hora de llevar a cabo las actividades diarias normales. También es normal que se tenga más sueño, por lo que el descanso durante esta etapa será fundamental para poder recargar toda la energía perdida durante el día.
- Hinchazón abdominal. Aunque no será a consecuencia del crecimiento del feto, pues hasta el segundo trimestre no se suele notar demasiado la barriga, el abdomen se puede hinchar y notar mayor presión, incluso un dolor similar al que sentimos unos días antes de la menstruación, durante las primeras semanas de embarazo. El aumento de tamaño del útero y las hormonas son los responsables.
- Más ganas de orinar. El aumento de la cantidad de líquido que el cuerpo tiene que procesar desemboca en que los riñones trabajen más y, por tanto, que se tenga mayor necesidad de orinar cada menos tiempo. Además, también influirá el crecimiento del útero.
Síntomas de alarma: sospecha de embarazo ectópico
El embarazo ectópico, es decir, cuando se produce la implantación del embrión fuera del útero, presenta algunos síntomas concretos, diferentes de los que se perciben en un embarazo que se está desarrollando con normalidad. Estos son:
- Dolor abdominal intenso.
- Dolor constante a un lado del abdomen, acompañado de náuseas y mareos.
- Dolor en la parte baja de la espalda (lumbago).
- Sangrado vaginal.
- Debilidad, fatiga, palidez y tensión baja.
Como te contamos en este otro artículo, es fundamental que, si se detectan los anteriores síntomas, se consulte de inmediato con el ginecólogo para que este pueda evaluar la situación y detectar si efectivamente se trata de un embarazo ectópico por el que se recomendará poner fin a la gestación, ya que no es viable un embarazo fuera del útero.
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