La toxoplasmosis en el embarazo es una de las afecciones que más dudas genera durante esta etapa.
Seguro que más de una vez habrás oído hablar de la toxoplasmosis en el embarazo. Se trata de la popular infección que causa un parásito llamado Toxoplasma gondii, que vive en las células de los seres humanos y de determinados animales domésticos y de granja, como los gatos, las ovejas o los cerdos, entre otras especies.
Por norma general, la mayoría de personas en edad adulta han superado la toxoplasmosis, en ocasiones sin ni siquiera percatarse de ello, ya que sus síntomas son livianos y similares a los de otras infecciones como la gripe (dolor de cabeza, fiebre, cansancio…).
No comer jamón es una de las primeras restricciones que deberá tener en cuenta la embarazada para cuidar de la salud de su futuro bebé, pero… ¿Sabes por qué? Te contamos todo sobre la toxoplasmosis en el embarazo.
¿Cómo se contagia la toxoplasmosis?
El contagio comienza cuando el animal en cuestión, en concreto el gato, ingiere un alimento (generalmente carne cruda) infectado con Toxoplasma gondii. El parásito se reproduce en el intestino del felino y, al cabo de unos días, a través de sus heces puede migrar a otros animales, como los mamíferos o las aves, y multiplicarse en el interior de sus órganos y tejidos.
En humanos, el contagio se produce cuando la persona ingiere carne cruda o poco hecha procedente de un animal contagiado. Se trata de la forma más común de infestación, pero también se puede dar a través del consumo de vegetales, leche y huevos crudos y de la ingesta de agua contaminada con este parásito.
La infección por toxoplasmosis no se transmite entre personas, sino únicamente cuando la mujer está embarazada se lo puede transmitir a su futuro bebé a través de la placenta. En este caso, se denomina toxoplasmosis congénita y puede suponer un gran riesgo para la salud del feto, tanto durante la gestación como después de su nacimiento, sobre todo cuando la infección se produce durante el primer trimestre del embarazo.
Consejos para evitar la infección por toxoplasmosis en el embarazo
Si estás pensando quedarte embarazada y quieres saber si has pasado la toxoplasmosis, puedes solicitar a tu médico un análisis de sangre que lo certifique.
Si no has tenido esta infección y estás embarazada, deberás tener en cuenta las siguientes recomendaciones para evitar contraer la toxoplasmosis en el embarazo:
- No comas carne cruda ni poco cocinada, cocina este tipo de alimentos siempre con una temperatura superior a 70ºC y durante más de 10 minutos.
- No comas fiambres/embutidos crudos, ahumados o curados, como el jamón, el chorizo, el lomo o el salchichón. A pesar de la creencia popular, no sirve de nada congelar el embutido para evitar la infección.
- Descarta también los lácteos (leche, yogures y quesos) sin pasteurizar.
- Lava bien y desinfecta las verduras y frutas antes de comértelas.
- Lávate bien las manos tras haber manipulado carne cruda.
- Después de usar un instrumento de cocina, como una tabla o un cuchillo, límpialo bien.
- Si convives con uno o varios gatos, lávate siempre bien las manos después de acariciarlos y evita el contacto directo con sus heces.
¿Tienes una sospecha de toxoplasmosis? Consulta lo antes posible con tu ginecólogo para que pueda solicitarte un análisis y detectar si se ha producido la infección.
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